Durante su participación en el Festival Internacional de Cine de San Sebastián, la actriz Jennifer Lawrence lanzó duras críticas contra la administración de Donald Trump, asegurando que la libertad de expresión en Estados Unidos “está siendo amenazada”.
La protagonista de Los juegos del hambre recibió el Premio Donostia a su trayectoria cinematográfica y aprovechó su discurso para expresar preocupación por la situación política actual en su país.
“Nuestra libertad de expresión está bajo ataque en Estados Unidos, incluso en el mundo del cine”, declaró Lawrence ante la prensa internacional, en lo que se interpretó como una referencia directa a las políticas culturales y comunicacionales del gobierno de Trump.
La actriz, de 35 años, afirmó que el arte y el cine deben ser espacios libres de censura y presión política, señalando que “la creatividad no puede florecer cuando el miedo o la polarización dominan el debate público”.
Medios como Euronews y Macronews reportaron que Lawrence también cuestionó la falta de apoyo a la comunidad artística en su país y la creciente división social bajo la actual administración.
Además, expresó su solidaridad con otros artistas y periodistas que —según dijo— han enfrentado presiones por expresar opiniones críticas hacia el gobierno estadounidense.
Durante el evento, Lawrence no solo mencionó el contexto estadounidense. También hizo referencia a otros gobiernos, incluyendo el de Benjamin Netanyahu en Israel, al hablar sobre el impacto global de los conflictos políticos y sociales.
“No se trata solo de un país o un líder. Se trata de cómo el poder usa el miedo para silenciar a la gente”, señaló la actriz.
Sus palabras generaron una fuerte ovación del público y fueron ampliamente difundidas en redes sociales, donde muchos destacaron su valentía al pronunciar un discurso abiertamente político en un evento cinematográfico internacional.
Jennifer Lawrence ha sido una figura activa en temas sociales y políticos desde hace varios años. En entrevistas previas, ha manifestado su rechazo al discurso de odio y a las políticas conservadoras de Trump, al tiempo que ha apoyado causas como la igualdad de género, la libertad de prensa y los derechos humanos.
Su participación en San Sebastián consolidó su imagen no solo como una actriz reconocida, sino también como una voz crítica dentro de Hollywood.
El Premio Donostia, que Lawrence recibió en esta edición del festival, celebra la trayectoria y contribución de figuras destacadas al cine mundial. En su discurso final, la actriz agradeció el reconocimiento y concluyó:
“El cine es una forma de resistencia. Mientras existan historias que contar, habrá esperanza”.
