El Décimo Tribunal Colegiado en Materia Civil del Primer Circuito revocó las medidas precautorias que protegían a TV Azteca, propiedad del empresario Ricardo Salinas Pliego, frente a una demanda de acreedores internacionales. Con esta resolución, la televisora deberá responder por una deuda que asciende a 580 millones de dólares, derivada del incumplimiento en el pago de bonos emitidos en los mercados internacionales.
El caso se remonta a 2017, cuando TV Azteca realizó una emisión de bonos internacionales por 400 millones de dólares, con una tasa de interés anual cercana al 8.25 %.
A partir de 2021, la empresa dejó de cumplir con sus obligaciones de pago, lo que llevó a los acreedores a declarar el vencimiento anticipado de la deuda.
Durante el proceso judicial, TV Azteca argumentó que las consecuencias económicas derivadas de la pandemia de COVID-19 constituían un caso fortuito o de fuerza mayor, lo que justificaba su incumplimiento temporal.
En ese contexto, la compañía obtuvo en México una medida precautoria que suspendía de manera temporal los pagos, decisión que fue ahora anulada por el tribunal federal.
El Tribunal Colegiado determinó que las medidas otorgadas previamente eran “excesivas e imprecisas”, ya que suspendían los efectos del contrato sin base jurídica suficiente.
Según la resolución, la pandemia no exime automáticamente a una empresa de cumplir sus obligaciones financieras, salvo que se acrediten formalmente los elementos de fuerza mayor.
Con esta decisión, los acreedores internacionales quedan facultados para exigir el pago inmediato de los 580 millones de dólares y continuar con los procedimientos de ejecución o recuperación en tribunales nacionales e internacionales.
Tras conocerse la sentencia, Grupo Salinas emitió un comunicado calificando la decisión como “contraria al Derecho” y adelantó que buscará negociar con los acreedores para alcanzar un acuerdo extrajudicial.
Por su parte, fuentes financieras señalan que el fallo podría reactivar embargos y acciones internacionales de cobro, mientras que el gobierno mexicano, encabezado por Claudia Sheinbaum, aseguró que el Estado no asumirá deudas privadas, aunque reconoció que el caso podría tener implicaciones dentro del arbitraje internacional promovido por los acreedores.
El fallo representa un duro revés para TV Azteca y marca un precedente sobre los límites de las medidas cautelares en litigios financieros internacionales.
También evidencia la presión que enfrentan las empresas mexicanas con deuda en mercados globales y el impacto reputacional que puede tener un incumplimiento prolongado frente a inversionistas internacionale




