Este jueves, un sismo de magnitud 6 estremeció una vasta área del este de Japón, con su epicentro ubicado frente a la costa de Fukushima. Afortunadamente, no se emitió alerta de tsunami y hasta el momento no se han reportado daños derivados del temblor.
El evento sísmico tuvo lugar a las 12:16 hora local, con su epicentro a 40 kilómetros de profundidad frente a la costa de la prefectura de Fukushima, al este del país, según la Agencia Meteorológica de Japón (JMA).
A pesar de la intensidad del sismo, que alcanzó el nivel 4 en la escala sísmica nipona, no se registraron daños significativos en las áreas cercanas. Sin embargo, las prefecturas colindantes de Iwate y Miyagi también experimentaron una agitación sísmica de similar magnitud.
La empresa operadora de la central de Fukushima, TEPCO, está llevando a cabo revisiones para asegurar que no haya ocurrido ningún incidente dentro de la planta como resultado del temblor, según informó la cadena estatal NHK. Además, la ferroviaria JR East suspendió temporalmente las operaciones del tren bala de Tohoku debido a un corte de luz, aunque las actividades se reanudaron poco después.
Afortunadamente, la central nuclear de Miyagi Ongawa no mostró anomalías y los niveles de radiación en las áreas circundantes permanecen estables.
Este evento sísmico se produce solo un día después de que un devastador terremoto de magnitud 7.4 golpeara Taiwán, dejando víctimas fatales y numerosos heridos, así como el colapso de varias estructuras.
Japón, ubicado en el Anillo de Fuego del Pacífico, experimenta una actividad sísmica significativa, con aproximadamente 1,500 terremotos registrados cada año, la mayoría de los cuales son de baja intensidad. El país ha desarrollado infraestructuras resistentes para hacer frente a estos eventos naturales.
El terremoto más devastador registrado en Japón ocurrió en marzo de 2011, cuando un sismo de magnitud 9 seguido de un tsunami causó la muerte o desaparición de unas 18,500 personas y desencadenó una crisis nuclear en la central de Fukushima. Los costos totales del desastre se estimaron en aproximadamente 112 mil millones de dólares, sin contar el extenso y delicado proceso de desmantelamiento de la planta nuclear.
