El tráfico caótico de Manila se ha convertido en el epicentro de la visita de Coldplay a Filipinas, con el cantante Chris Martin componiendo una canción que captura la demencia de los atascos. Mientras tanto, la presencia del presidente del país, Ferdinand Marcos Jr., y su comitiva en helicóptero para asistir a uno de los conciertos ha desatado críticas por el uso de fondos públicos y la aparente falta de atención a los problemas del transporte colectivo.
La llegada presidencial en helicóptero al Philippine Arena de Bulacan, al norte de Manila, generó controversia en las redes sociales, donde algunos cuestionaron la asignación de recursos públicos para asistir a un evento musical. Las críticas se centraron en la aparente falta de acciones por parte del presidente Marcos para abordar la problemática movilidad urbana que afecta a millones de filipinos, quienes experimentan diariamente largas horas de tráfico, especialmente en la congestionada capital.
En medio de la polémica, el comandante de seguridad de Marcos defendió la elección del helicóptero, argumentando «complicaciones imprevistas del tráfico» que suponían riesgos para la seguridad presidencial. Estas explicaciones no lograron calmar la indignación en línea.
Incluso el líder de Coldplay, Chris Martin, abordó el tema del congestionamiento vial en Manila durante el concierto, agradeciendo a los asistentes por llegar a pesar del tráfico. Martin compartió su asombro ante el nivel de tráfico en la ciudad, calificándolo como el «número uno del mundo».
La situación del tráfico en Manila no es desconocida internacionalmente, ya que en 2023 encabezó la lista del Índice de Tráfico de TomTom, con velocidades promedio de apenas 19 kilómetros por hora durante las horas pico y un 52% de sus carreteras congestionadas. La empresa de tecnología del transporte destaca que, normalmente, se tarda más de 25 minutos en recorrer solo 10 kilómetros.
En respuesta a estas preocupaciones, el Departamento de Transporte filipino anunció proyectos de infraestructura de carreteras para mejorar la experiencia de los viajeros y abordar la creciente congestión en las zonas urbanizadas. El secretario de Transporte, Jaime Bautista, aseguró que acelerarán estos proyectos en colaboración con organismos apropiados y el sector privado.
Además, Filipinas tiene planes para modernizar los yipnis a diésel con minibuses este año y está trabajando en un sistema ferroviario de transporte masivo que se espera esté operativo en 2025, según la Philippine News Agency. Estas iniciativas buscan aliviar la presión sobre las vías de Manila y mejorar la movilidad en la capital y sus alrededores.