Hugo Aguilar Ortiz, abogado de origen mixteco, se perfila como el próximo presidente de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) tras obtener la mayor cantidad de votos en las elecciones judiciales del 1 de junio de 2025. Su elección marca un hito histórico al ser el primer indígena en liderar el máximo tribunal desde Benito Juárez en el siglo XIX.
Durante su campaña, Aguilar anunció que no utilizará la tradicional toga de los ministros, sino que portará trajes de gala representativos de las comunidades indígenas. Esta decisión responde a peticiones reiteradas de pueblos originarios que le solicitaron no convertirse en un «funcionario tradicional» y mantener viva su identidad cultural.
La presidenta Claudia Sheinbaum respaldó públicamente esta postura, afirmando que Aguilar tiene derecho a usar vestimenta típica en lugar de la toga, aunque reconoció desconocer la normativa interna de la SCJN al respecto.
Aguilar ha dedicado más de tres décadas a la defensa de los derechos de los pueblos originarios, participando en procesos clave como los diálogos de San Andrés con el EZLN y promoviendo reformas constitucionales en favor de las comunidades indígenas.
Su elección ha generado tanto esperanza como escepticismo. Mientras algunos celebran la inclusión de una voz indígena en la SCJN, otros cuestionan su cercanía con el partido gobernante Morena y su participación en proyectos controvertidos como el Tren Maya.
Con su llegada a la presidencia de la SCJN, Aguilar propone una justicia más cercana a las comunidades, incluyendo la posibilidad de llevar audiencias públicas directamente a las regiones indígenas, buscando emitir resoluciones basadas en realidades concretas y no únicamente en formalismos legales.
Esta elección representa un paso significativo hacia una justicia más inclusiva y representativa de la diversidad cultural de México.
