El cardenal estadounidense Robert Francis Prevost Martínez ha sido elegido como nuevo papa en el Cónclave, sucediendo al fallecido Francisco. A sus 69 años, Prevost cuenta con una trayectoria marcada por su cercanía a los sectores vulnerables y una destacada labor en el Vaticano, donde se desempeñaba desde 2023 como prefecto del Dicasterio para los Obispos, cargo en el que fue designado por el propio Francisco.
Nacido el 14 de septiembre de 1955 en Chicago, hijo de madre de ascendencia española, ingresó a la Orden de San Agustín en 1977, profesando sus votos solemnes en 1981. Es licenciado en Ciencias Matemáticas por la Universidad de Villanova y posee una sólida formación en Derecho Canónico, obteniendo su doctorado magna cum laude en la Pontificia Universidad de Santo Tomás de Aquino en Roma.

En 1982 fue ordenado sacerdote y tres años más tarde partió a Perú, donde inició un extenso trabajo pastoral en la misión agustiniana de Trujillo. Allí sirvió como prior, director de formación y maestro de profesos, consolidando su reputación como líder espiritual y formador. En 2014, Francisco lo nombró obispo de Chiclayo, donde trabajó hasta su regreso al Vaticano en 2023.
A lo largo de su carrera, Prevost ha sido miembro de siete dicasterios vaticanos y vicepresidente de la Conferencia Episcopal Peruana. Cercano a Francisco, comparte su visión de una Iglesia pobre y solidaria con los más desfavorecidos. En una entrevista reciente, rememoró el primer viaje apostólico del Pontífice fallecido a Lampedusa, destacando su compromiso con los migrantes.
En cuestiones polémicas, como la posibilidad de ordenar a mujeres, ha mostrado una postura conservadora, afirmando que “clericalizar a las mujeres no necesariamente soluciona un problema, podría generar uno nuevo”. No obstante, se ha mostrado firme en su compromiso con la justicia social y la lucha contra el cambio climático, alineándose con el legado de Francisco.