En Puebla, un conductor al volante de un llamativo Camaro rojo ignoró la orden de detenerse y desencadenó una intensa movilización policial que parecía salida de una película de acción. Según testigos, el sujeto pisó el acelerador y «voló» por las calles, atrayendo la atención de decenas de patrullas.
En plena huida, los oficiales no tuvieron más opción que abrir fuego para intentar detener al intrépido automovilista. Finalmente, el drama llegó a su fin cuando el conductor fue interceptado justo afuera de la plaza El Mesón.
«El tipo parecía más preocupado por su auto que por las patrullas detrás de él, ¡como si estuviera en Rápidos y Furiosos!», comentó un curioso en el lugar. Por suerte, nadie resultó herido, aunque el Camaro ahora lleva un par de «autógrafos» cortesía de las balas.
El conductor fue detenido y llevado a disposición de las autoridades para aclarar los hechos, mientras su auto se convirtió en la estrella indiscutible del día.