A pocos días de que Donald Trump asumiera nuevamente la presidencia de Estados Unidos, México se encuentra en intensas negociaciones para establecer medidas que beneficien a ambas naciones en temas de migración, control de armas y seguridad fronteriza. La presidenta Claudia Sheinbaum Pardo declaró que su administración mantiene una postura ‘reglamentaria’ para garantizar una buena coordinación con el gobierno estadounidense.
Durante su gira por la Mixteca de Oaxaca, Sheinbaum atendió las demandas de los pobladores en temas de salud, infraestructura, programas sociales y seguridad. Sin embargo, en su encuentro con medios de comunicación, las preguntas se centraron en la relación diplomática con Estados Unidos y la posibilidad de deportaciones masivas bajo la nueva administración de Trump.
Sheinbaum responde sobre las conversaciones con EE.UU.
En declaraciones a medios locales, la mandataria aseguró que el gobierno mexicano mantiene un diálogo abierto con la administración de Trump para resolver los desafíos migratorios. «Sigue habiendo conversaciones; estamos obligados los pueblos a tener buena relación con Estados Unidos, entonces hay diálogo (…) Respeto a nuestra soberanía y el respeto al pueblo, las naciones, estamos obligados a tener una buena relación», afirmó la titular del Ejecutivo mientras se dirigía a Santiago Pinotepa Nacional el pasado 26 de enero.
La propuesta del plan general
Sheinbaum también subrayó la importancia del apoyo de los connacionales que residen en Estados Unidos, destacando su contribución tanto a la economía mexicana como a la estadounidense. «Nuestros hermanos migrantes son personas de bien, trabajadores, que hacen mucho por la economía de ambos países», puntualizó.
El plan general que busca abordar estos temas de manera integral será presentado en febrero, con propuestas enfocadas en la seguridad fronteriza, protección de los derechos de los migrantes y el desarrollo de estrategias para el crecimiento económico conjunto.
Postura ante las políticas migratorias de Trump
Días atrás, Donald Trump anunció una serie de decretos relacionados con la migración en la región. En respuesta, Sheinbaum afirmó que México mantendrá una postura abierta al diálogo para garantizar el respeto a los derechos humanos y la estabilidad en la frontera.
Pese a la incertidumbre sobre posibles tensiones comerciales, la presidenta mexicana descartó una «guerra comercial» con Estados Unidos. Adelantó que estos temas serán abordados en detalle durante la próxima «Mañanera del Pueblo», donde se discutirá el presunto rechazo de un avión con migrantes deportados y las renegociaciones del Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC).