La Secretaría de Salud informó sobre un brote de la bacteria Klebsiella oxytoca en el Estado de México, que hasta el momento ha causado la muerte de 13 personas y ha afectado a un total de 20 pacientes. Las autoridades investigan si las muertes están directamente relacionadas con la bacteria, mientras que siete personas continúan en tratamiento médico con resultados negativos en sus cultivos tras recibir atención especializada.
Causa posible: contaminación en nutrición parenteral
El brote se ha asociado a una posible contaminación de las soluciones de nutrición parenteral (NPT) o de los insumos utilizados para su aplicación. Ante esta situación, la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris) emitió una alerta sanitaria para inmovilizar preventivamente los lotes de NPT producidos desde el 21 de noviembre por una empresa identificada en la investigación.
Acciones de contención
Desde el 29 de noviembre, las autoridades han implementado medidas para controlar el brote. Cofepris realizó inspecciones en la central de mezclas donde se fabricaron las soluciones parenterales, sin encontrar hallazgos críticos en las instalaciones. Sin embargo, los análisis de las materias primas utilizadas en su producción continúan.
El Instituto de Diagnóstico y Referencia Epidemiológica (InDRE) logró aislar las bacterias en muestras humanas y en cultivos de las soluciones parenterales, avanzando en la identificación del origen del brote.
Coordinación y monitoreo
La Secretaría de Salud, Cofepris, el InDRE, la Dirección General de Epidemiología y las autoridades sanitarias del Estado de México trabajan en conjunto para determinar la fuente exacta de la contaminación y prevenir nuevos casos. Además, se mantiene un monitoreo permanente para descartar la presencia de brotes similares en otras entidades del país.
Llamado a la calma y acciones preventivas
Las autoridades aseguran que están tomando medidas contundentes y recalcan la importancia de la vigilancia en los hospitales. Se reitera el compromiso de informar de manera transparente sobre los avances de la investigación.
Este brote pone en evidencia la necesidad de reforzar los protocolos de seguridad en la producción y administración de insumos médicos en México, para proteger a los pacientes más vulnerables.