La cantante compartió su frustración por el trato recibido durante su carrera y reafirmó su decisión de alejarse del ojo público para priorizar su bienestar.
Britney Spears, ícono mundial del pop, sorprendió a sus seguidores al revelar en redes sociales que decidió mudarse a México para escapar del constante acoso de los paparazzi. En un video publicado en Instagram el día de su cumpleaños 43, la cantante denunció el trato “deshumanizante” de los medios y su impacto negativo en su vida.
«Me duele profundamente cómo los paparazzi han distorsionado mi imagen. Me retratan de formas crueles, como si llevara una máscara», expresó Britney, refiriéndose a las fotos que circulan durante sus vacaciones. Agregó que este comportamiento ha sido una constante en su vida pública, lo que la llevó a buscar tranquilidad fuera de Estados Unidos.
Una vida bajo escrutinio
La carrera de Spears ha estado marcada por éxitos musicales, pero también por una intensa presión mediática. Durante los últimos años, su vida personal y profesional han sido objeto de atención constante, especialmente tras el movimiento #FreeBritney, que apoyó su lucha para poner fin a la tutela de su padre.
En su libro de memorias, The Woman in Me, la artista describió cómo la tutela le robó su autonomía y feminidad. “Me convertí en un robot, perdiendo pedazos de lo que me hacía sentir como yo misma”, escribió. Este periodo de control legal, que duró 13 años, marcó profundamente su vida y fue un catalizador para su decisión de priorizar su bienestar.
Un nuevo comienzo lejos de los reflectores
Tras años de exposición mediática, Spears ha tomado medidas para alejarse de la industria musical y centrarse en su recuperación emocional. Recientemente, celebró simbólicamente su independencia “casándose consigo misma”, gesto que muchos interpretaron como un mensaje de empoderamiento.
Además, Britney ha aprovechado su tiempo para fortalecer vínculos familiares, especialmente con su hijo menor, Jayden, a quien comparte con Kevin Federline. Fuentes cercanas indican que estos momentos han sido cruciales para su proceso de sanación.
Separación amistosa y nuevos proyectos
En el ámbito personal, la cantante finalizó su divorcio de Sam Asghari este año. Aunque la relación terminó tras poco más de un año de matrimonio, ambos mantuvieron un proceso amigable, respetando los acuerdos prenupciales.
Por su parte, Asghari continúa trabajando en su carrera actoral, mientras que Spears planea mantenerse alejada de la industria, enfocándose en su bienestar.
El futuro de Britney Spears
Mientras la cantante busca un respiro en México, un proyecto cinematográfico basado en sus memorias está en desarrollo. Dirigida por Jon M. Chu, la película promete explorar las complejidades de ser una celebridad bajo constante escrutinio, con un enfoque especial en la experiencia de Spears.
En palabras de Britney: “Es tiempo de dejar atrás el ruido y abrazar la paz que tanto he buscado. México ha sido un refugio para encontrarme nuevamente”.