El general ruso Igor Kirilov, jefe de las tropas de defensa radiológica, química y biológica del ejército ruso desde 2017, fue asesinado este martes en Moscú mediante la detonación de un explosivo oculto en un patinete eléctrico, según informaron medios internacionales citando fuentes anónimas.
Detalles del atentado
El ataque ocurrió a primera hora de la mañana frente al edificio donde residía Kirilov. De acuerdo con las investigaciones preliminares, el dispositivo fue detonado a distancia, causando la muerte del general y su asistente. El incidente ocurrió apenas un día después de que Kirilov participara en una reunión de alto nivel con el presidente ruso Vladimir Putin y la plana mayor del ejército ruso.
Reacciones en Rusia y Ucrania
El Kremlin no tardó en reaccionar, calificando el hecho como un «acto terrorista». Mientras tanto, fuentes ucranianas, que prefirieron mantener el anonimato, declararon que el general era un «objetivo legítimo», acusándolo de coordinar operaciones militares y el uso de armas químicas prohibidas en Ucrania.
El gobierno de Ucrania ha insistido en que Kirilov era un “criminal de guerra”, postura respaldada por un tribunal de Kiev que había emitido una orden de captura en su contra.
Por su parte, la cancillería rusa, a través de su portavoz Maria Zajarova, acusó a Estados Unidos y a sus aliados de estar detrás del ataque, asegurando que la labor de Kirilov había sido clave para exponer “la red de laboratorios biológicos en Ucrania”.
El legado de Kirilov
Igor Kirilov había ganado notoriedad como la «voz oficial» de Rusia en temas de armas químicas y biológicas. Durante los últimos años, denunció públicamente la existencia de laboratorios biológicos estadounidenses en Ucrania, una acusación que la ONU calificó como infundada al no presentarse pruebas concluyentes.
El general también aseguró que Estados Unidos experimentaba con métodos de dispersión de epidemias a través de mosquitos y murciélagos, una narrativa que fue utilizada como parte del discurso oficial ruso durante el conflicto con Ucrania.
Impacto del ataque
Este atentado supone un duro golpe para el ejército ruso, ya que Kirilov es el militar de más alto rango asesinado en suelo ruso desde el inicio de la invasión de Ucrania en 2022. Analistas consideran que la acción pone en evidencia las fallas de seguridad en Moscú y la capacidad de Ucrania para ejecutar operaciones estratégicas detrás de las líneas enemigas.
El senador ruso Konstantin Kosachov calificó la muerte de Kirilov como una “pérdida irreparable” para la estructura militar de Rusia, y llamó a reforzar las medidas de seguridad en el país.
Contexto de inseguridad en Rusia
La muerte de Kirilov ocurre apenas días después del asesinato del diseñador de misiles Mijail Shatsky, quien fue abatido frente a su domicilio en las afueras de Moscú. Estos incidentes refuerzan las preocupaciones de que Ucrania ha intensificado sus operaciones encubiertas en territorio ruso, enfocándose en objetivos de alto perfil.
Mientras tanto, la opinión pública rusa se encuentra en alerta ante la posibilidad de más ataques similares, poniendo en entredicho la percepción de invulnerabilidad en la capital rusa.
Conclusión
La muerte de Igor Kirilov simboliza un punto crítico en el conflicto ruso-ucraniano. Más allá de las pérdidas militares, este evento revela la capacidad de Ucrania para ejecutar operaciones estratégicas en el corazón de Rusia, y podría derivar en una escalada del conflicto en los próximos meses.
