Microsoft está preparando la integración de un número significativo de empleados de OpenAI, especializados en inteligencia artificial, en sus oficinas de LinkedIn en San Francisco, según fuentes cercanas a los planes revelaron a Axios. La compañía está respondiendo al revuelo interno en OpenAI tras la salida del exCEO Sam Altman, ofreciendo igualar las compensaciones para aquellos que consideren mudarse. En medio de la incertidumbre en OpenAI, estas medidas podrían marcar un giro importante para ambas partes y la industria en general.
Después del cambio de liderazgo en OpenAI, más del 90% de los empleados firmaron una carta exigiendo la renuncia de la junta directiva o amenazando con mudarse a Microsoft, liderados por Altman. Aunque Satya Nadella, CEO de Microsoft, anunció inicialmente que Altman y Greg Brockman, cofundador de OpenAI, se unirían a la empresa para formar un nuevo equipo de investigación avanzada en IA, el destino de ambos aún no está claro.
Nadella dejó en manos de los empleados de OpenAI la decisión de quedarse o trasladarse a Microsoft, asegurando que su empresa tiene los recursos necesarios para innovar de manera independiente. Kevin Scott, Director de Tecnología de Microsoft, expresó su disposición a igualar las compensaciones de los empleados de OpenAI que deseen unirse a la iniciativa de Microsoft.
Estos movimientos se dan después de que Altman dejara su cargo tras una revisión interna que cuestionó su transparencia con la junta directiva. OpenAI, conocida por el lanzamiento de ChatGPT en noviembre, ha sido clave en el desarrollo rápido de servicios de IA en la industria tecnológica, generando interés de grandes compañías como Microsoft. La situación tensa en OpenAI y los movimientos de Microsoft no solo afectan la dinámica interna de ambas compañías, sino también el panorama competitivo en el campo de la inteligencia artificial.
La absorción del liderazgo por parte de Microsoft podría modificar la visión original de OpenAI, inclinándola hacia las presiones del mercado y planteando preguntas sobre el futuro de la IA y su monopolio por parte del sector privado. La inversión pública en investigación central de IA en comparación con la inversión privada, la dominancia del mercado de la nube por empresas como Amazon, Alphabet y Microsoft, y la regulación de la computación en la nube como un servicio público esencial son temas que resurgen en medio de este cambio potencial en OpenAI.
