Un inusual y alarmante incidente tuvo lugar en un vuelo de Alaska Airlines este domingo en los Estados Unidos. Un piloto de la misma compañía, Joseph Emerson, que viajaba como pasajero en la aeronave, enfrenta ahora 83 cargos de intento de asesinato, después de que supuestamente trató de apagar los motores del avión en pleno vuelo.
Los hechos llevaron al aterrizaje forzado del avión en el aeropuerto de Portland, Oregón, después de que se reportara una amenaza de «seguridad creíble» en el vuelo que había despegado de Everett, Washington, con destino a San Francisco, California. A bordo de la aeronave se encontraban 83 personas más.
Emerson, de 44 años, ocupaba un asiento plegable en la cabina, ubicado detrás de los pilotos. Esta ubicación es comúnmente ocupada por los pilotos fuera de servicio cuando viajan de regreso a su base de operaciones. Sin embargo, en este caso, la situación tomó un giro sorprendente.
El piloto enfrenta no menos de 83 cargos por poner en peligro inminente a los pasajeros y la tripulación, además de un cargo por poner en peligro la aeronave, según registros de la Oficina del Alguacil del condado de Multnomah, citados por el canal NBC.
Alaska Airlines, en un comunicado oficial, informó que «el ocupante del asiento plegable intentó sin éxito interrumpir el funcionamiento de los motores» del avión, que estaba operado por Horizon Air, una filial de Alaska Airlines. Afortunadamente, la tripulación reaccionó con rapidez y evitó la pérdida de potencia del motor, logrando asegurar la aeronave sin mayores incidentes.
La Administración Federal de Aviación emitió una alerta y aclaró que este incidente de seguridad no está relacionado con amenazas terroristas derivadas de conflictos internacionales. No obstante, el FBI se encuentra investigando este inusual incidente que ha conmocionado a la comunidad de la aviación.
